Perú: César Acuña Renuncia a La Libertad y Confirma su Candidatura Presidencial para 2026

César Acuña Peralta ha anunciado oficialmente su postulación a la presidencia de la República en las elecciones generales del 2026, una decisión que implica su renuncia al cargo de gobernador regional de La Libertad. Este movimiento político redefine el panorama electoral peruano, marcando el tercer intento del líder de Alianza para el Progreso (APP) por alcanzar el sillón presidencial y dejando una gestión regional bajo el escrutinio público.

Un Nuevo Intento Presidencial y Sus Promesas

El lunes 13 de octubre de 2025, César Acuña oficializó su candidatura a través de un comunicado emitido por Alianza para el Progreso. Sus principales banderas, según lo expresado, son la lucha frontal contra la corrupción y la recuperación de la esperanza para los peruanos. Acuña aspira a ser "el Presidente de los jóvenes del Perú que quieran estudiar, que quieran trabajar y que quieran oportunidades para salir adelante".

Entre sus propuestas, el excongresista y exalcalde de Trujillo ha delineado la necesidad de una "reforma profunda y necesaria" para combatir la inseguridad ciudadana, reactivar la economía nacional y generar dos millones de empleos en un plazo de cinco años. También ha insistido en el compromiso de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, garantizando acceso a servicios básicos como agua, luz y carreteras. Estas metas ambiciosas buscan resonar con las necesidades cotidianas de miles de familias en todo el país.

Para los peruanos, la relevancia de estas promesas radica en su potencial impacto en el día a día: desde la seguridad en las calles hasta la disponibilidad de oportunidades laborales y la mejora de infraestructuras esenciales. La capacidad de un futuro gobierno para cumplir estos compromisos determinará directamente la calidad de vida y el desarrollo económico de las comunidades.

La Salida de La Libertad: Un Legado Cuestionado

La decisión de Acuña de postular a la presidencia conlleva su salida anticipada del Gobierno Regional de La Libertad. Aunque el líder de APP afirma dejar un "legado con proyectos que transformarán la vida de los liberteños" y la "convicción del deber cumplido", su gestión ha sido objeto de diversas críticas.

Entre los cuestionamientos se encuentran obras inconclusas, denuncias sobre el supuesto uso político del aparato regional y una gestión percibida como ineficaz frente a los crecientes índices de criminalidad en la región. Luis Valdez, secretario general de APP, ha reconocido que existe un "trabajo pendiente" en La Libertad, particularmente en materia de seguridad, y ha señalado la necesidad de un "rediseño del aparato público" ante un problema que calificó de "generalizado".

La renuncia de Acuña se suma a la de otros gobernadores y alcaldes que también han dejado sus cargos para buscar la presidencia en los comicios de 2026, como Rafael López Aliaga. Esta práctica, si bien legal, genera un impacto inmediato en la gobernabilidad de las regiones y municipios, pues implica el relevo de autoridades a mitad de periodo, pudiendo afectar la continuidad y ejecución de proyectos en curso.

Una Mirada Contable y Empresarial

Desde una perspectiva contable y empresarial, la decisión de César Acuña de renunciar a la gobernación regional para una nueva contienda presidencial representa una significativa inversión de capital político y personal. Un cargo asegurado como gobernador es una posición de "liquidez" y "flujo de caja" político constante, mientras que una candidatura presidencial es una apuesta de alto riesgo con un retorno de inversión (ROI) incierto, especialmente tras dos intentos fallidos previos (en 2016 fue excluido y en 2021 obtuvo un 4.8% de los votos).

Las críticas a su gestión en La Libertad, especialmente sobre obras inconclusas y la inseguridad, pueden ser vistas como "pasivos" o "deudas" en su historial de gestión. Estos "costos" de reputación podrían mermar su "valor de marca política" y la confianza de los "inversores (los votantes)" en sus promesas. La promesa de dos millones de empleos y una reforma profunda requerirá una planificación financiera detallada y una capacidad de ejecución presupuestaria que supere los desafíos enfrentados en su gestión regional. Un plan de negocios político de esta envergadura exige claridad en los "costos de implementación" y la viabilidad de sus "márgenes de éxito".

¿Qué Sigue?

Con este anuncio, el panorama político de Perú se dinamiza, y se espera que más figuras se sumen a la carrera por la presidencia de la República. Acuña, por su parte, se enfocará en armar su plancha presidencial y en perfeccionar una "propuesta técnica sólida" que le permita diferenciarse de otros contendores.

Las próximas semanas y meses serán cruciales para observar cómo los candidatos, incluido César Acuña, estructuran sus campañas, presentan sus equipos técnicos y, lo más importante, cómo sus propuestas abordan las demandas urgentes de los ciudadanos peruanos. La atención se centrará en la solidez de sus planes para enfrentar desafíos como la seguridad, la reactivación económica y el acceso a servicios básicos, que son pilares fundamentales para el bienestar de cada hogar en Perú.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *